Un grupo de 26 choferes de colectivos urbanos de la ciudad de Corrientes quedaron sin trabajo después de estar suspendidos por dos meses y percibiendo el 60% de su salario.

Los trabajadores pertenecen a la empresa concesionaria de las líneas 101 y 110. Tenían entre 10 y 26 años de servicio. Denunciaron que solo se les abonó el 50% de las indemnizaciones correspondientes. Para esta acción la empresa se amparó jurídicamente en el sistema preventivo de crisis y en la Emergencia del Transporte.
Por su parte los choferes sostienen que ni la Unión Tranviaria Automotor (UTA) ni la secretaría de Trabajo de la Provincia, los defendieron. Cada uno de los trabajadores ahora está con asistencia legal particular.