La fábrica de hilados dejará de producir durante un mes y dará vacaciones adelantadas a parte de sus empleados con el 70% de sus salarios.

La empresa alega que, debido a la baja demanda y a la apertura de las importaciones por parte del Gobierno Nacional, acumuló un exceso de mercadería.
En estos días, delegados de la Asociación Obrera Textil y de la Comisión Interna de trabajadores se reunieron con representantes de la empresa para discutir un aumento salarial. Solicitaban que el valor de la hora de trabajo, actualmente de 2.019 pesos, pase al menos a 2.500 pesos.
A diferencia de lo que señala la empresa, los sindicalistas remarcaron que la planta sigue generando utilidades y que existe margen para atender las necesidades de los operarios y advirtieron que no descartan medidas de fuerza y que las suspensiones anunciadas no hacen más que precarizar aún más el panorama y aumentar la angustia de cientos de familias que dependen de la hilandería. La planta cuenta con 650 empleados.