Según algunos testigos, el helicóptero habría sufrido un desperfecto técnico antes de precipitarse, dando varias vueltas en el aire antes de caer. Debido a las irregularidades del terreno y a la inestabilidad de la nave, una de las aspas habría tocado el suelo, lo que provocó que la máquina se incendiara tras el siniestro.
El piloto y el copiloto, lograron un aterrizaje de emergencia cerca de unas líneas de alta tensión y salir ilesos antes de que las llamas consumieron totalmente la máquina. Sólo resultaron con heridas leves y fueron trasladados a un centro de salud donde se encuentran fuera de peligro.
Las autoridades confirmaron que se trataba de un helicóptero contratado por el Gobierno Nacional para la lucha contra los incendios.
UN HELICOPTERO QUE COMBATÍA EL FUEGO CAYÓ EN ITUZAINGÓ

Se precipitó a tierra en una zona rural de Ituzaingó, a unos diez kilómetros de la zona urbanizada de la localidad.