El dinero que no pudo ser depositado en el banco se hallaba en la caja fuerte de un departamento ubicado sobre la avenida Teniente Ibáñez al 700.

Representaba la recaudación de la distribuidora de alimentos y mayorista de bebidas “Eduardo” ubicada en el Barrio San Benito y que, según trascendidos, alcanzaría a los diez millones de pesos.
Se sospecha que los delincuentes conocían la situación y en horas de la madrugada forzaron la puerta de la vivienda y se dirigieron directamente a la caja fuerte desde donde se llevaron la importante suma de dinero y un valioso reloj de colección, sin embargo, dejaron abandonados teléfonos celulares, notebooks y otros objetos de valor que quedaron dispersos por el piso, en medio de un gran desorden.
La policía presume que los ladrones tuvieron la colaboración de algún entregador y aunque sus imágenes quedaron registradas por las cámaras de seguridad de la zona, aun no fueron identificados y no hay detenidos.
La investigación está a cargo de la Fiscalía de turno y efectivos de la Comisaría Segunda de la ciudad capital.